El CBD es generalmente bien tolerado y rara vez produce efectos secundarios. Sin embargo, algunas personas deben tomar precauciones adicionales, incluyendo:
- Personas con el sistema inmunológico debilitado. En estudios celulares, el CBD se asoció con la disminución de la actividad de las células inmunitarias T y B, por lo tanto, aumentando la probabilidad de infecciones y empeorando el VIH, el crecimiento de tumores, las metástasis y el asma.
- Personas que toman medicamentos. El CBD puede disminuir la actividad de las enzimas hepáticas, llamadas citocromo P450, responsables de metabolizar más del 60% de los medicamentos recetados. Consulte a su médico para descartar cualquier interacción, ya que el CBD puede aumentar o disminuir los efectos de sus medicamentos.
- Tenga cuidado al combinar el CBD con hierbas o productos botánicos en suplementos dietéticos. La investigación sobre estas interacciones es limitada.
Tenga cuidado al combinar el CBD con el alcohol.
La mayoría de las personas que utilizan el CBD no informan de ningún efecto secundario, pero algunos pueden incluir una ligera disminución de la presión arterial, sequedad de boca, mareo, somnolencia, malestar gastrointestinal, disminución del apetito y cambios de humor.
Mujeres embarazadas, lactantes y niños
En la actualidad, se carece de investigaciones sobre la seguridad del uso del CBD en mujeres embarazadas y lactantes, así como en niños. Por favor, consulte con su médico antes de usarlo.
Evite el uso de la marihuana durante el embarazo. Los estudios demuestran que el THC puede interrumpir la formación de redes neuronales y provocar defectos de nacimiento relacionados con el sistema nervioso. Los adolescentes tampoco deben consumir marihuana ya que el THC puede tener un efecto en sus cerebros en desarrollo.
